Realidades
Desde los 11 años, Inés María empezó a presentar crisis, cuya manifestación consistía en, de inicio, rigidez corporal y, posteriormente, doblaba su cuerpo colocándolo en una posición tal que era casi imposible hacer que la misma pudiera extender sus músculos. Hasta los 22 años fue atendida por neurólogo y psiquiatra por convulsiones y depresión. A partir de esa fecha entra a ser mi paciente y, después de un proceso de tratamiento psicoterapéutico durante meses, en un sesión, esta, experimentando una crisis de llanto incontrolable motivada por mí, manifiesta que fue violada sexualmente por un vecino médico, persona de confianza en la familia, y el mismo la mantenía sugestionada con amenazas si se atrevía a hablarlo. Esto fue precisamente cuando tenía 11 años y vivía con su abuela; quien, para colmo, una semana después de ocurrir el hecho a la niña, este llega a visitarla; la niña, al verle, sale corriendo y recibe una pela por este hecho de “indisciplina”. Cabe señalar que