Se podrían evitar

Por generaciones hemos escuchado que “el dominicano pone candado después que le
roban”, convirtiéndose en una manera coloquial de definir la actitud que asume la gran
mayoría de las personas en su vida cotidiana.

Hace tiempo frecuentaba un banco donde, entre el escritorio de la persona donde yo solía
ir y la de al lado, había una especie de desnivel y cordón grueso. En más de una ocasión
fue elemento de tropiezo para muchos, incluyéndome a mí, que tuve que sostenerme
fuertemente para no caerme. Ambas jóvenes se quejaban de los frecuentes tropezones
ocasionados por éste. Un día cualquiera, llamo por teléfono y pregunto por una de ellas,
me informan que está bajo licencia médica por una caída en el mismo lugar que le provocó,
aunque parezca exagerado, una fractura en el coxis por la cual tuvo que permanecer varios
meses en proceso de rehabilitación.

Accidentes de este tipo, que a veces son funestos, podrían evitarse con simplemente
precaver. Vemos a diario grandes catástrofes donde se pierden cantidades de vidas, sólo
por descuido. No sé si recuerdan el accidente de autobús, el cual se desvió hacia el mar,
donde murieron varias personas. Se habló de tomar medidas de protección en dicha
avenida, no obstante, se ha olvidado.

Quiero citar un elemento que ha provocado los peores accidentes de tránsito en nuestro
país, del cual se ha hablado mucho, se han invertido grandes sumas de dinero en quipos
para detectarlo; sin embargo continúa siendo el mayor responsable al día de hoy de los
principales accidentes. Su nombre es “alcohol”, y está presente con gran frecuencia en
personas que transitan a diario en nuestras calles. Son muchos los individuos que conducen
vehículos de motor con alteraciones reflejas producidas por el efecto de éste. Además, la
forma como el desinhibe al consumidor provoca un desenfreno fatal.

No sé cuando nuestras autoridades empezarán a tomar medidas drásticas en estos casos,
ya que por estos individuos son muchas las familias en distintos puntos del país que hoy
están de luto. Previsión en todo hace falta, concientización ciudadana que conlleve a que
asumamos compromiso para cuidar vidas. Vivo entre las principales arterias de la ciudad,
y da pena ver, los fines de semana especialmente (aunque esto se ve cualquier día), el
chillido de las llantas de sujetos, principalmente jóvenes, que transitan desenfrenadamente
por las mismas ocasionando las peores tragedias.

Autoridades, ¿qué piensan ustedes hacer?; ciudadanos comunes, ¿Cuál es su aporte?

Comentarios

Entradas populares de este blog

Contaminación ambiental

Conviene a todos

Lo que a otros les falta