Hacia dónde ir (1/2)
María, conversando con una amiga, le expresa los problemas que está pasando con su hijo Carlitos, el cual tiene apenas 10 años de edad: “Desde pequeño no puedo con él, le hablo y no me entiende. A la hora de vestirlo, sentarlo a la mesa para comer es un problema, porque quiere hacerlo todo a su manera. No me vale corregirlo ni castigarlo. En la escuela, desde el principio, tampoco obedece a profesores; evita jugar con otros niños y, cuando lo hace, se pelea. Las labores en clase casi nunca las completa. Es por todo esto que lo han expulsado dos veces.”. Son muchos los padres que en este momento se identifican con lo que está viviendo esta madre y, por ende, la familia completa, porque, como hemos dicho, “cuando hay un problema en uno de los miembros, afecta a todos los demás”. Siempre han habido los llamados “niños traviesos” o inquietos, y que los padres, por ignorancia, van reforzando y aumentando dichas conductas desagradables. En colegios privados y de cierto nivel social, suelen r