Darle carácter (1/3)

Durante las últimas semanas, en nuestra población, se han generado una serie de eventos
que han despertado gran preocupación en todos los sectores de la sociedad. Los hechos
de violencia intrafamiliar, ocurridos en diferentes puntos del país, nos muestran el
deterioro en la salud mental de una parte importante de la población.

Son muchos los hogares donde el manejo de sus miembros es totalmente disfuncional.
Sin embargo, parecen imperceptibles una serie de hechos que día a día se operan en la
misma. Por lo general, previo a eventos como estos, se han venido dando una serie de
situaciones o síntomas no tomados en cuenta, tales como: violencia verbal, amenazas
recurrentes y en ocasiones, hasta denuncias a las autoridades. Si hacemos un sondeo con
vecinos y allegados, verémos que desde hace tiempo en esa familia han existido grandes
problemas.

Cuando en nuestro cuerpo aparece una fiebre, lo primero a buscar es la fuente que la
origina, ya que la fiebre es solo síntoma de algo más profundo.

Se hace énfasis en la problemática económica, delincuencia, política, entre otras; no
obstante, en la parte esencial o matriz de todo lo que acontece, a penas se hace mención,
y esta es la familia. Se han ido operando cambios de valores, reglas y principios dentro de
los hogares, donde todo parece estar caminando al revés.

Insisto que familias sanas aseguran sociedades sanas, razón por la cual es más que
necesario buscar alternativas que permítan, desde los primeros síntomas, acortar y con
ello evitar mayores complicaciones. Para ello necesitamos trabajar con esta parte todos
aquellos que, de manera directa o indirecta, tenemos que ver con e manejo de nuestra
sociedad.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Contaminación ambiental

Conviene a todos

Lo que a otros les falta