¿Y entonces?


Sin pretender enviar a nadie al paredón, ni mucho menos, porque esta persona haya cometido actos
que en algún momento empañen su moral; no puedo dejar pasar por alto en mis papeles de mamá,
psicóloga y persona que asume cada semana una responsabilidad con un medio como este, de llevar
mensajes que contribuyan a un mejor manejo de la sociedad; en cuanto al recibimiento hecho a una
artista internacional, a la cual se le da el mérito de “Huésped Distinguida”, persona, que por el contrario,
ha estado involucrada en grandes escándalos internacionales, y que, como persona pública, todo el
mundo conoce. Estamos trabajando en el rescate de valores morales y éticos para nuestras familias y
sociedad, independientemente de dónde nos encontremos. Una de las cosas de mayor preocupación a
iglesias, medios, familias es precisamente ayudar a rescatar esa distorsión de valores.

Es totalmente contradictorio a la lucha que estamos llevando a favor de estos, respuestas de este tipo
que, entonces, por el contrario enseña que no tenemos límites, nada es malo, nada es moral o inmoral,
todo es permitido, sin importar lo que se haya hecho. Debemos evitar dar bofetadas de este tipo a
aquellos que han tratado, a veces por generaciones de familias, enseñarles a sus hijos la importancia
y necesidad de dar lo mejor de sí y, como decía en uno de mis trabajos, hacer todo a la excelencia.
¿Qué se preguntarán nuestros jóvenes? ¿Qué se les dice a ellos cuando se le da honor a quien honor no
merece?

Considero, este tipo de hechos genera, a una sociedad carente de valores, una gran confusión;
especialmente a los más vulnerables, adolescente y jóvenes, de quienes depende el futuro de la misma.

Paralelamente, se acaba de dar el premio de reconocimiento al Hombre y Mujer del Año en Rep.
Dom., el cual se logra realizando actos dignos y ejemplares a base de entrega y dedicación de lo que
hacemos. Con esto sí se inspira a esta generación joven a entender que sí vale la pena hacer las cosas
con empeño, responsabilidad; apegarse a todo aquello que contribuya cada día a ser mejor; que sí vale
la pena estudiar, trabajar, mantener todo lo que por años en la familia se ha inculcado a base de grandes
esfuerzos y ejemplos de los padres.

A mi entender, ha sido un error garrafal. Hay que evitar repetirlo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Contaminación ambiental

Conviene a todos

Lo que a otros les falta